sábado, 14 de julio de 2012

Invitan a Misa de la Virgen del Carmen en nuestra Parroquia


Domingo XV Semana Tiempo Ordinario. Ciclo B

Hoy, Domingo XV (B) del tiempo ordinario, leemos en el Evangelio que Jesús envía a los Doce, de dos en dos, a predicar. Hasta ahora han acompañado al Maestro por los caminos de Galilea, pero ha llegado la hora de comenzar la difusión del Evangelio, la Buena Nueva: la noticia de que nuestro Padre Dios nos ama con un amor infinito y que nos ha traído a la vida para hacernos felices por toda la eternidad. Esta noticia es para todos. Nadie ha de quedar al margen de la enseñanza liberadora de Jesús. Nadie queda excluido del Amor de Dios. Es necesario llegar hasta el último rincón del mundo. Hay que anunciar el gozo de la salvación plena y universal, por medio de Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre por nosotros, muerto y resucitado y presente activamente en la Iglesia.

Equipados con «poder sobre los espíritus inmundos» (Mc 6,7) y con un bagaje casi inexistente -«Les ordenó que nada tomasen para el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni alforja, ni calderilla en la faja; sino: ‘Calzados con sandalias y no vistáis dos túnicas’» (Mc 6,8)- inician la misión de la Iglesia. La eficacia de su predicación evangelizadora no vendrá de influencias humanas o materiales, sino del poder de Dios y de la sinceridad, de la fe y del testimonio de vida del predicador. «Todo el impulso, la energía y la entrega de los evangelizadores provienen de la fuente que es el amor de Dios infundido en nuestros corazones con el don del Espíritu Santo» (Juan Pablo II).

Habiendo comenzado el siglo XXI, la Buena Noticia no ha llegado todavía a todas partes, ni con la intensidad que era necesaria. Se ha de predicar la conversión, hay que vencer a muchos espíritus malignos.

Quienes hemos recibido la Buena Noticia, ¿lo sabemos valorar? ¿Somos conscientes de ello? ¿Estamos agradecidos? Sintámonos enviados, misioneros, urgidos a predicar con el ejemplo y, si fuera necesario, con la palabra para que la Buena Nueva no falte a quienes Dios ha puesto en nuestro camino.

La Virgen del Carmen ...y el escapulario



El escapulario no salva por sí solo como si fuera algo mágico o de buena suerte, ni es una excusa para evadir las exigencias de la vida cristiana


El próximo 16 de Julio recordaremos a Nuestra Señora del Carmen. Reflexionemos hoy un poco sobre esta advocación y las grandes promesas de su escapulario.

Los carmelitas tienen, entre otros, el mérito de haber llevado esta advocación mariana a todos los estratos del pueblo cristiano.

En el siglo XII algunos eremitas se retiraron al Monte Carmelo, con San Simón Stock.

La Virgen Santísima prometió a este santo un auxilio especial en la hora de la muerte a los miembros de la orden carmelitana y a cuantos participaran de su patrocinio llevando su santo escapulario.

Los Carmelitas han sido conocidos por su profunda devoción a la Santísima Virgen. Ellos interpretaron la nube de la visión de Elías (1 Reyes 18, 44) como un símbolo de la Virgen María Inmaculada. Ya en el siglo XIII, cinco siglos antes de la proclamación del dogma, el misal Carmelita contenía una Misa para la Inmaculada Concepción.


La estrella del Mar y los Carmelitas.

Los marineros, antes de la edad de la electrónica, dependían de las estrellas para marcar su rumbo en el inmenso océano. De aquí la analogía con La Virgen María quien como, estrella del mar, nos guía por las aguas difíciles de la vida hacia el puerto seguro que es Cristo.

Por la invasión de los sarracenos, los Carmelitas se vieron obligados a abandonar el Monte Carmelo. Una antigua tradición nos dice que antes de partir se les apareció la Virgen mientras cantaban el Salve Regina y ella prometió ser para ellos su Estrella del Mar. Por ese bello nombre conocían también a la Virgen porque el Monte Carmelo se alza como una estrella junto al mar.


Los Carmelitas y la Virgen del Carmen se difunden por Europa.

La Virgen Inmaculada, Estrella del Mar, es la Virgen del Carmen, es decir a la que desde tiempos remotos allí se venera. Ella acompañó a los Carmelitas a medida que la orden se propagó por el mundo. A los Carmelitas se les conoce por su devoción a la Madre de Dios, ya que en ella ven el cumplimiento del ideal de Elías. Incluso se le llamó: "Los hermanos de Nuestra Señora del Monte Carmelo". En su profesión religiosa se consagraban a Dios y a María, y tomaban el hábito en honor ella, como un recordatorio de que sus vidas le pertenecían a ella, y por ella, a Cristo.


¿Qué es el Escapulario carmelita?

Los seres humanos nos comunicamos por símbolos. Así como tenemos banderas, escudos y también uniformes que nos identifican. Las comunidades religiosas llevan su hábito como signo de su consagración a Dios.

Los laicos no pueden llevar hábito, pero los que desean asociarse a los religiosos en su búsqueda de la santidad pueden usar el escapulario. La Virgen dio a los Carmelitas el escapulario como un hábito miniatura que todos los devotos pueden llevar para significar su consagración a ella. Consiste en un cordón que se lleva al cuello con dos piezas pequeñas de tela color café, una sobre el pecho y la otra sobre la espalda. Se usa bajo la ropa. Junto con el rosario y la medalla milagrosa, el escapulario es uno de los mas importantes sacramentales marianos.

Dice San Alfonso Ligorio, doctor de la Iglesia: "Así como los hombres se enorgullecen de que otros usen su uniforme, así Nuestra Señora Madre María está satisfecha cuando sus servidores usan su escapulario como prueba de que se han dedicado a su servicio, y son miembros de la familia de la Madre de Dios."


El escapulario es un sacramental.

Un sacramental es un objeto religioso que la Iglesia haya aprobado como signo que nos ayuda a vivir santamente y a aumentar nuestra devoción. Los sacramentales deben mover nuestros corazones a renunciar a todo pecado, incluso al venial.

El escapulario, al ser un sacramental, no nos comunica gracias como hacen los sacramentos. Las gracias nos vienen por nuestra respuesta de amor a Dios y de verdadera contrición del pecado, lo cual el sacramental debe motivar.


¿Cómo surgió el escapulario?

La palabra escapulario viene del Latín "scapulae" que significa "hombros". Originalmente era un vestido superpuesto que cae de los hombros y lo llevaban los monjes durante su trabajo. Con el tiempo se le dio el sentido de ser la cruz de cada día que, como discípulos de Cristo llevamos sobre nuestros hombros. Para los Carmelitas particularmente, pasó a expresar la dedicación especial a la Virgen Santísima y el deseo de imitar su vida de entrega a Cristo y a los demás.


La Virgen María entrega el escapulario el 16 de julio de 1251.

En el año 1246 nombraron a San Simón Stock general de la Orden Carmelita. Este comprendió que, sin una intervención de la Virgen, a la orden le quedaba poco tiempo. Simón recurrió a María poniendo la orden bajo su amparo, ya que ellos le pertenecían. En su oración la llamó "La flor del Carmelo" y la "Estrella del Mar" y le suplicó la protección para toda la comunidad.

En respuesta a esta ferviente oración, el 16 de julio de 1251 se le aparece la Virgen a San Simón Stock y le da el escapulario para la orden con la siguiente promesa:

"Este debe ser un signo y privilegio para ti y para todos los Carmelitas: quien muera usando el escapulario no sufrirá el fuego eterno"

Aunque el escapulario fue dado a los Carmelitas, muchos laicos con el tiempo fueron sintiendo el llamado de vivir una vida mas comprometida con la espiritualidad carmelita y así se comenzó la cofradía del escapulario, donde se agregaban muchos laicos por medio de la devoción a la Virgen y al uso del escapulario. La Iglesia ha extendido el privilegio del escapulario a los laicos.


Explicación de la Promesa:

Muchos Papas, santos como San Alfonso Ligorio, San Juan Bosco, San Claudio de la Colombiere, y San Pedro Poveda, tenían una especial devoción a la Virgen del Carmen y llevaban el escapulario. Santos y teólogos católicos han explicado que, según esta promesa, quien tenga la devoción al escapulario y lo use, recibirá de María Santísima a la hora de la muerte, la gracia de la perseverancia en el estado de gracia (sin pecado mortal) o la gracia de la contrición (arrepentimiento). Por parte del devoto, el escapulario es una señal de su compromiso a vivir la vida cristiana siguiendo el ejemplo perfecto de la Virgen Santísima.

¿Que es orar?


Son muchas las definiciones que se encuentran en todos los libros de espiritualidad…, acerca de lo que es orar y después de haber leído y meditado sobre un porrón de ellas, es el caso que no he llegado nunca a encontrar una exacta definición de los que es orar, y ello a mi juicio, es porque todas las definiciones ponen de manifiesto solo una o dos de las características de la oración, pero no se recogen todas. Esto es para mí, una consecuencia de  lo distintas que son nuestras almas, de la misma forma que también son distintos nuestros cuerpos y caracteres. Se podría decir que cada uno cuenta la feria tal como le ha ido en ella.  Pero a juzgar por las definiciones y comentarios sobre la oración, que a continuación voy a transcribir, a todos les ha ido muy bien el orar, porque en algunos su amor y su entusiasmo no tiene límites.

            - “Siendo la oración una relación personal del hombre con Dios, esta relación es diferente para cada uno de nosotros, por eso ninguna oración es completamente parecida a otra”. Lafrance, Jean,
            - “Orar es, en su más íntima esencia, un acto de amor, y la oración es tanto más perfecta cuanto más se refleja en ella el amor, cuanto más se eleva el que ora del amor imperfecto al perfecto”. Benedikt Baur, O.S.B.,
             - “La oración es la hazaña más sublime de la cual es capaz el espíritu humano”. Stein, Edith. O.C.D.
            - “La oración es ejercicio de entendimiento y de imaginación, según la capacidad de cada persona, para mirar y admirar a Dios y en su mirada hacer florecer el amor y que el amor lo llene todo con su fragancia”. Santa Teresa de Jesús, O.C.D.
            - “La oración es un medio para la perfección; no es la perfección misma”. Boylan, Eugène. O. Cist. R.
            - “Orar…, es unirse a Dios, unirse a la voluntad de Dios a lo largo de todo el día; es, pues, vivir en estado de oración continua”. Lafrance, Jean,
            - “La oración es el fundamento de toda labor sobrenatural; con la oración somos omnipotentes y, si prescindiésemos de este recurso, no lograríamos nada... En la perseverancia en la diaria oración, se encuentra el origen de nuestra identificación con Cristo y una fuente continua de alegría”. Fernández Carvajal, y P. Beteta,
            - “…, no es otra cosa, a mi parecer, sino tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas, con quien sabemos nos ama”. Santa Teresa de Jesús, O.C.D.
            - “La oración es el medio privilegiado de volverte a sumergir sin cesar en esta luz de la que has nacido”. Lafrance, Jean.
            - “El secreto de la oración consiste en el ansia de Dios, en el ansia de ver a Dios”. Dajczer, Tadeusz,
            - “Orar es hacer sitio al Espíritu. Es dejar que el Espíritu vaya tomando posesión, cada vez mas, de nuestros corazones; es entregarle a Él las riendas; es permitirle al Espíritu abrir una ruta en la oscuridad de la fe; es entregarse al amor”. Mc Caffrey-Levêque-Beldarrain-Moriconi,
             “La oración es el compendio de nuestra relación con Dios Podríamos decir que somos lo que oramos”. Carretto, Carlo.
            - “Eres cristiano en la medida en que sabes orar… porque en el camino hacia Dios cada vez hay que aprender a orar de diferente forma…pero sin olvidar que la oración y el sacrificio están por encima de la actividad”. Dajczer, Tadeusz,
            - “Como la oración es ejercicio de amor, se hace oración amando. El que ora ama. De cualquier modo que se ejercite el amor, se vivirá la oración, y se hará oración”. Santa Teresa de Jesús, O.C.D.
            - “Orar, es gustar desde aquí abajo, la vida eterna, conocer al Padre y a su enviado Jesucristo. Es el cielo que comienza en nosotros”. Lafrance, Jean.
            - “La vida es un viaje, y la oración es el viático para el viaje, un viático necesario para levantarnos cada vez que se nos agotan las fuerzas”. Mc Caffrey-Levêque-Beldarrain-Moriconi,
            - “La oración es el comienzo del cielo en ti, y por eso la oración es dolorosa… La oración es cavar tan hondamente tu corazón para que ríos de agua viva puedan inundar todo tu ser, y en primer lugar darte una gota de ella. La oración es la condición indispensable para que la semilla de la Palabra y de la Eucaristía germinen en ti y sean fecundas”. Lafrance, Jean.
            “Mas vale hablar con Dios que hablar de Dios”. Santa Teresa de Lisieux, O.C.D.
            - “La alegría se mete en la vida de la oración, hasta que no nos queda más remedio que romper a cantar: porque amamos y cantar es cosa de enamorados”. Escrivá de Balaguer, Mons.
            - “Orar significa ante todo ser uno con Cristo”. Teresa de Calcuta.
             “A medida que se desarrolla la fe, la oración se hace más pura y más ferviente. …la oración al igual que la eucaristía conduce al hombre hacia la transformación y la conversión”. Dajczer, Tadeusz,
            - “La oración, no consiste en hablar mucho, sino en amar mucho; esto mismo es lo que se desprende de sus palabras”. Santa Teresa de Jesús. O-C-D-
            - “La oración es la feliz hoguera en que se enciende y conserva el fuego del santo amor”. San Alfonso María de Ligorio.
            - “Un alma sin oración, es como un cuerpo con parálisis o tullido, que aunque tiene miembros no los puede mandar”. Santa Teresa de Jesús.
            - “Dios…, entiende lo que nosotros no sabemos decirle”. Dom Vital Lehodey. O. Cist. R.

            Termino esta glosa, con unas cuantas reflexiones de mi cosecha partículas sacadas de viejas notas, manuscritos y diarios. Estas dicen:
            - “La oración es un arma que ponemos en manos de Dios, para que luche y venza por nosotros”.
            - “Para los que no estamos satisfechos con nuestro esfuerzo en la oración, es reconfortante recordar que el Señor, no nos pide más de lo que podamos dar. Puede que no estemos rezando todo lo bien que desearíamos; pero si estamos rezando todo lo bien que podemos, no hay porque preocuparse, aunque no hay que olvidar que, siempre, es posible hacer, algo más de lo que uno cree que es su límite. . 
            - “Pienso Señor, que, si al menos, no se te puede dar calidad, hay que darte cantidad, porque siempre al final de la cantidad saldrá la calidad”.
            - “La finalidad última de la oración es tratar de hacer de nuestra vida una continua conversación con el Señor”.
            - “No olvidar nunca que la comunión frecuente es una recomendación, pero la oración continua es un mandato divino”.
            -“El camino espiritual que hemos de recorrer, es el camino que nos lleva a Ti Señor. La oración es el combustible, la energía que necesitamos para recorrer este camino. El camino a veces es llano, cómodo y placentero, hace buen tiempo, y se recorre con gozo, estamos en época de consolaciones; pero a veces es áspero, empinado, y hay que recorrerlo bajo un temporal de frío y lluvia, estamos en época de aridez. Sea como sea, el camino hay que recorrerlo, y cuanta más energía (oración) tengamos, mejor y más rápidamente lo recorreremos”. J.C.
            - “La oración es la respiración del alma, por ello Señor, une a mi respiración, la oración que necesito. De forma que cuando respire esté orándote a Ti”.
            -“Que mi oración Señor, me lleve cada día a desearte mas, para terminar asemejado y transformado en Ti, por el amor que a Ti te tengo”.
            - “Rezar, no es más que mirar al sagrario, con ojos enamorados y decirte susurrando muy despacio T…e   q…u…i…e…r…o”.

Mi más cordial saludo lector y el deseo de que Dios te bendiga.

            Otras glosas o libros del autor relacionados con este tema.
-        Libro. RELACIONARSE CON DIOS.- www.readontime.com/isbn=9788461220588
-        Libro. LA SED DE DIOS.- www.readontime.com/isbn=9788461316281 
-        Fuego devorador de Dios. Glosa del 25-03-10
-        Oración. Pan del alma. Glosa del           07-01-12
-        ¿Orar es amar? Glosa del 08-03-12
-        Aridez o sequedad. Glosa del 01-11-09
-        Fuego devorador de Dios. Glosa del 25-03-10
-        Oración. Pan del alma. Glosa del 07-01-12
-        ¿Orar es amar? Glosa del 08-03-12
-        El gozo en la oración. Glosa del 05-02-10
-        Gozo oracional. Glosa del 06-09-10


            Si se desea acceder a más glosas relacionadas con este tema u otros temas espirituales, existe un archivo Excel con una clasificada alfabética de temas, tratados en cada una de las glosas publicadas. Solicitar el archivo a: juandelcarmelo@gmail.com

sábado, 7 de julio de 2012

Meditación XIV Domingo del Tiempo Ordinario - Ciclo B



Quien escucha el relato del Evangelio puede sorprenderse ante la actitud de los paisanos de Jesús: quedan asombrados e impactados por su sabiduría y sus enseñanzas. Sin embargo, pesa más el conocimiento que ya traían de Él: «¿No es éste el carpintero?» Se impone el “ya lo conocemos”, la desconfianza, y así se hacen incapaces de dejarse tocar y transformar por la Buena Nueva que Él anuncia.


Nosotros, “desde la tribuna” y a la distancia, podemos caer en juzgar fácilmente a aquellos oyentes escépticos: “¿cómo es posible que no le creyesen?”, y acaso añadimos también: “Si yo hubiera estado allí, ¡yo sí le habría creído!”

Pero, ¿no endurecemos acaso también nosotros tantas veces nuestros propios corazones a la Palabra divina, al anuncio del Evangelio? ¿Le creemos tanto al Señor de modo que nos afanamos en hacer de sus enseñanzas nuestro modo de pensar, de sentir y de actuar? ¿O acaso reconozco que todo lo que ha enseñado Cristo es admirable, aunque no lo aplique en mi vida cotidiana? ¿Tomo en cuenta sus enseñanzas a la hora de pensar, de tomar decisiones, de orientar mi acción? ¿Es la distancia en el tiempo, o el no poder verlo o escucharlo personalmente, una excusa válida para no seguir al Señor, para no tomar suficientemente en serio sus enseñanzas?

Nuestra propia dureza y rebeldía frente a Dios se expresa muchas veces no en una incredulidad declarada sino en unas preferencias de hecho. Vivimos muchas veces en un ‘agnosticismo funcional’, es decir, decimos creer, pero actuamos como quien no cree. Y es que es en las pequeñas y grandes opciones de la vida cotidiana, en nuestras decisiones y acciones de cada día, como manifestamos si verdaderamente le creemos a Dios o sólo decimos que le creemos.

¡Cuántas veces, por mi falta de fe y confianza en Él, el Señor se ve impedido de obrar en mí el gran milagro de mi propia conversión y santificación! Pidámosle al Señor todos los días que aumente nuestra pobre fe, y pongamos nosotros los medios necesarios para hacer que esta fe se haga cada vez más fuerte y coherente por la lectura y meditación constante de la Escritura, por el estudio asiduo del Catecismo, por la oración perseverante y la acción servicial y evangelizadora.

Bendición Celta


Decálogo para el verano


Ha llegado el verano, la época de descanso, lo que quiere decir, un tiempo, un mes, o unos dias, para reponer fuerzas, descubrir horizontes, revisar planos y adivinar nuevas rutas. Todo eso, sin dejar de caminar. Acaso en nuestra agenda personal, sea bueno colocar unos puntos para estos meses veraniegos, algo así como un "decálogo"que nos haga vivir más plenamente, con gozo y alegría.

1. Considera cada amanecer un momento maravilloso para ofrecer nuestra vida a Dios, para escuchar su Palabra, para cumplir su voluntad.

2. Planifica cada jornada, con tiempo para todo: para el trabajo, para el estudio, para la lectura, para la oración, para el descanso.

3. Visita a Jesús en el Sagrario, haz allí un buen rato de oración, fuente de infinidad de bienes para nosotros.

4. Dedica tiempo a la lectura: haz una lista de buenos libros que te informen, te formen, te enriquezcan culturalmente y te inflamen el espíritu.

5. Entrégate a la familia: conocerse más, dialogar mejor, estrechar los lazos del amor y de la unidad.

6. Repasa tu vida: para ello, lo mejor es un curso de retiro, unos dias de silencio y reflexión.

7. Haz nuevos planes para el futuro: ¿qué nos sobra? ¿qué nos falta? ¿qué necesitamos? ¿qué caminos nuevos se me ofrecen?

8. Procura hacer apostolado: Hace unos dias, el Papa Benedicto XVI nos decía a todos: "Exhorto a todos los fieles a ser como fermento en el mundo, mostrándose cristianos presentes, emprendedores y coherentes". El apóstol es un enviado, un comunicador, un sembrador, un testigo.

9. Cultiva tus aficiones: viajes, excursiones, música, pintura, visitas... El mundo está hoy a nuestro alcance y hemos de saborear sus posibilidades de bien.

10. Sé feliz en todo momento, sabiendo que la felicidad tiene siempre una clave: la fidelidad. Siempre fieles, siempre alegres. Fidelidad a nuestra vocación, a nuestra misión en la vida, a deberes y obligaciones, a llamadas divinas y humanas. 

Precioso "decálogo" para vivir este ardiente verano, en el que la crisis nos envuelve y nos incendia, pero también, puede hacernos reflexionar a fondo sobre nuestros pasos y nuestro caminar. El verano nos trae descanso. Y ha de traernos tambien un tiempo de silencio interior, no tanto para escudriñar la conciencia, que tambien, cuanto para descubrir hermosos horizontes, a ser posible, de grandeza.


Fuente: Religión en libertad.com

Meditación Dominical

Calendario en Agenda

  • 1er. Domingo de Mes - Hora Santa Reparadora a la Divina Misericordia, 3:00pm.
  • 2do. Sábado de Mes - Noches de Adoración y Alabanza 8:00pm.
  • 2do. Domingo de Mes - Misa Devotos de la Virgen de la Altagracia, 11:00am.
  • 4to. Domingo de Mes - Misa OFS, 9:00am.
  • Martes Antonianos, Todos los martes de 11:00am. a 12:00pm. en la Capilla del Santísimo Sacramento
  • Todos los Domingos - Reunión Grupo de Jóvenes - Iniciando con la Misa de 9:00am.
  • Todos los miércoles, Reunión Movimiento Juan XXIII, 7:00pm.
  • Todos los jueves, Círculo de Oración, 7pm.
  • Todos los Sábados, Limpieza del Templo Parroquial, desde las 8:00am.

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